El Centro de Investigaciones Clínicas USS evaluará la eficacia y seguridad de nuevos fármacos, vacunas o dispositivos de uso médico, aportando evidencia para su uso por parte de la población.

Cada tratamiento médico con fármacos, vacunas o dispositivos, sus diferentes dosis e indicaciones para los distintos grupos de la población, son resultado de extensos estudios que permitieron validar su eficacia y seguridad. Considerando la importancia y el profundo impacto de estos estudios en la salud pública global, la Universidad San Sebastián inauguró un nuevo Centro de Investigaciones Clínicas (CICUSS), que será parte de la Facultad de Medicina y Ciencia.

“Hemos llegado a este momento luego de estar participando hace cuatro años en investigaciones clínicas como institución, en el desarrollo de nuevas vacunas contra COVID-19, neumococo e influenza, y otros medicamentos”, dice Carlos Pérez, decano de la facultad y director del Centro, cuyo propósito principal será “velar por la correcta ejecución de investigaciones clínicas en el marco de las buenas prácticas e integridad en investigación, siguiendo las regulaciones y las normas internacionales y nacionales”.

En el mismo sentido, el vicerrector de Investigación y Doctorados, Carlos Vio, comenta que la creación de este Centro es la consecuencia natural del aumento de la capacidad de investigación de nuestra universidad que ha permitido tener 10 doctorados, más de 200 investigadores, y convenios y alianzas estratégicas con los principales centros del país. A este hito se suma la reacreditación del Comité Ético Científico USS (CEC-USS) a fines de 2023, que fue autorizado por el Ministerio de Salud para evaluar ensayos clínicos farmacológicos o con dispositivos médicos, lo que permitirá apoyar al nuevo Centro.

Estudios en curso

Actualmente, el Centro de Investigaciones Clínicas de la Universidad San Sebastián trabaja en la ejecución de un estudio junto al laboratorio GSK sobre el uso de antirretrovirales, y está en etapas iniciales de un proyecto con el laboratorio francés Sanofi-Pasteur para el desarrollo de una vacuna contra el virus respiratorio sincicial en personas mayores de 60 años, proyecto pionero en Chile y que incluirá a cerca de 200 participantes.

El Virus Respiratorio Sincicial no sólo afecta gravemente a lactantes, lo que se tratará de combatir con el recién adquirido medicamento Nirsevimab por parte del Estado, sino que también puede producir complicaciones y muertes en adultos mayores.

Según el artículo publicado recientemente por la revista internacional Pulmonary Therapy, titulado “Understanding the Burden of Respiratory Syncitial Virus in Older Adults in Latin America: An Expert Perspective on Knowledge Gaps” “se hace necesario disponer y utilizar ampliamente de pruebas de diagnóstico para VRS, establecer grupos de trabajo que puedan abordar esta necesidad sanitaria e impulsar iniciativas que ayuden a generar concientización sobre esta enfermedad en la población más adulta del continente”. “Existen dos vacunas contra el VRS licenciadas en otros países, que son muy seguras y efectivas para prevenir esta infección en adultos y la tercera es la que se estudiará en nuestro Centro”, comentó Carlos Pérez quien es uno de los autores del artículo internacional mencionado.