El establecimiento educacional fue financiado con recursos del Gobierno Regional de Los Lagos

La Comisión Provincial Llanquihue del Consejo Regional de Los Lagos se reunió con la comunidad educativa de la Escuela Arturo Alessandri de Frutillar, el municipio local, el Servicio Local de Educación Pública Llanquihue y la empresa Luis Navarro, para conocer el estado de avance de ciertas obras del recinto educacional que no han sido subsanadas por la empresa constructora, en el proceso de postventa.

Recordemos que este establecimiento educacional, que alberga a cerca de 500 alumnos, obtuvo el visto bueno por parte del CORE para su reconstrucción, destinando más de 6 mil millones de pesos para esta obra.

Los Consejeros pudieron evidenciar en terreno algunos problemas en la Escuela; entre ellos, filtración de agua, fallas en la calefacción y falta de inmobiliario, a pesar de aprobase –en su momento-  un aumento de recursos por 265 millones de pesos.

Tras la reunión, el presidente de la Comisión Provincial Llanquihue del CORE Los Lagos, Cesar Negrón, informó que “la ejecución tiene varias falencias que hay que subsanar. ¿Y quién subsana esta falencia? es la empresa constructora. Ellos son los responsables. Hoy día el compromiso que hay es que en septiembre esto debería estar subsanado. Vamos a estar ahí encima fiscalizando para que esto ocurra”.

En la instancia, el CORE Rodrigo Arismendi, expuso que “lamentablemente tenemos problemas en lo que es filtración de agua porque tenemos una quinta fachada y creo que no está funcionando como corresponde. La quinta fachada es una fachada verde que tenemos sobre el gimnasio, lo cual está produciendo filtraciones en los muros. Y la idea es dar una solución a esto”.

Por parte de la Escuela Arturo Alessandri, la directora Aurora Leiva, enfatizó en la idea de que “hay varios puntos que todavía hay que subsanar y la empresa está en el momento justo para desarrollarlos. Vemos con esperanza y también con alto compromiso como comunidad después de haber sufrido un largo tiempo de espera de esta nueva infraestructura. No queremos decepcionarnos de una entrega a medias”.

Desde la empresa constructora esperan subsanar los problemas, cuando las condiciones climáticas sean las más aptas para trabajar. Si no es así, se realizaría el cobro de la boleta de garantía.

En torno al inmobiliario, que en su mayoría son sillas, se espera que la Escuela cuente con ella en un par de semanas.