Desde este lunes, estudiantes de la Universidad San Sebastián retornaron a sus actividades académicas presenciales para seguir avanzando con trabajos exclusivamente prácticos.

 Con credencial universitaria en mano, mascarillas y control de temperatura se realizó el ingreso de los estudiantes de la Universidad San Sebastián que desde este lunes retornaron a la Sede De la Patagonia para avanzar con las actividades académicas en el Centro de Salud, el Hospital Simulado y el Hospital Clínico Veterinario.

Siguiendo las recomendaciones de la autoridad sanitaria, además de las normas establecidas en un Plan de Retorno Seguro compartido por la misma Casa de Estudios en Puerto Montt, los jóvenes se reintegraron presencialmente a las asignaturas prácticas para continuar avanzando en sus planes de estudio.

“Nos hemos preparado a lo largo de estos meses para el desarrollo de la docencia en pandemia, adaptándonos no sólo desde la virtualidad, sino también para la presencialidad bajo estrictos protocolos y espacios seguros para nuestros estudiantes”, sostuvo Sergio Hermosilla Pérez, vicerrector de la Universidad San Sebastián.

La autoridad universitaria comentó que la institución está haciendo todo lo que está a su alcance para el regreso de sus estudiantes al aula, especialmente aquellos que necesitan adquirir conocimientos mediante el desarrollo de actividades en contextos clínicos, como el caso de los futuros profesionales de la salud, donde también se añaden otros elementos de protección personal.

Gratitud Estudiantil

Cabe destacar que desde hace unas cuatro semanas la institución aperturó el Centro de Salud Universitario para atención de urgencia realizadas exclusivamente por profesionales odontólogos; en tanto, desde miércoles comenzó la atención odontopediátrica para niños de 2 a 12 años, a las cuales se incorporaron estudiantes en grupos reducidos, organizados y controlados.

Nicolás Gallardo, estudiante de cuarto año de la carrera de Odontología, destacó la preocupación que hay en medio del contexto sanitario. “Las instalaciones me han parecido muy adecuadas al tiempo que estamos viviendo. La importancia que le dieron a proteger al paciente por sobre todo, y a nosotros, entregándonos elementos de protección personal es sumamente importante. Se agradece la preocupación de la Universidad por sus estudiantes, para que podamos trabajar y estudiar de la mejor manera posible”.

Para Daniela Montiel, estudiante de segundo año de la carrera de Enfermería, ha sido un proceso interno de poder superar la incertidumbre del regreso. “Al comienzo sentí temor de volver, pero desde el primer día me he dado cuenta de las medidas de seguridad e higiene que tiene la Universidad, lo que me hace sentir más segura. Además, nos entregaron un kit de protección personal para que podamos desarrollar de mejor manera nuestras clases. En muchas partes hay dispensadores del alcohol gel y los baños también se encuentran sanitizados y delimitados para cumplir con el distanciamiento. Lo mismo en las salas, estamos bien separados, y ahora con ganas de seguir aprendiendo, que es lo que más queremos con nuestros compañeros”, aseveró.

En esta misma línea, Pedro Pablo Ovando (Quinto Año de Odontología) comentó que han visto un “gran cambio. La clínica quedó muy bien implementada y, por lo tanto, podemos tratar de mejor manera al paciente, entregándo un mejor servicio. Esto servirá también para las futuras generaciones. Hay mucho compromiso desde lo técnico y humano. La verdad es que yo esperaba un cambio en la clínica, pero no pensé que sería tanto como lo que veo. Gratamente sorprendido”, aseguró.

Además de la carrera de Odontología y Enfermería, el retorno ha contemplado en su primera etapa a cuerpos docentes y estudiantes de las carreras de Medicina Veterinaria, quienes ya se encuentran realizando sus respectivas actividades académicas, como atenciones clínicas en el Hospital Clínico Veterinario, previa reserva de horas.