Klga. Andrea Riquelme Gómez, Directora de Escuela y carrera de Kinesiología, UNAB Sede Viña del Mar.

 Día del Kinesiólogo en Chile

La Kinesiología es la ciencia que estudia el movimiento y esto no solo de estructuras que podemos visualizar como la musculatura, sino de todos aquellos elementos que permiten el funcionamiento de un cuerpo. La comprensión de lo que esto significa, ha evolucionado con los más de 100 años que tiene nuestra profesión, desde que se propone esta denominación de Kinesiología por Nils Posse en 1886, o quizá antes con Carl August Georgii en 1854, momentos en los que se relaciona al movimiento corporal con terapias para generar mejoras en la salud de las personas.

En la actualidad, la Kinesiología permite abordar una alta diversidad de condiciones de salud y de grupos etarios, estar presentes en todos los niveles de atención en salud, en sistemas públicos y privados, en contextos de salud, laborales, educacionales y deportivos-recreativos, llevándonos como profesionales a tomar caminos de especialización y a incorporar una alta gama de herramientas tecnológicas que faciliten los diversos procesos de intervención que realizamos, tanto en presencialidad como en virtualidad. Pero, el desarrollo de nuestra profesión no solo es evidente en el ámbito de la intervención kinesiológica, sino también en el de la investigación, la que ha posibilitado ir estableciendo bases sólidas a nuestro quehacer profesional. Además, la inserción en el ámbito de la gestión, permite aportar con nuestra mirada para el desarrollo de la salud en el país.

Lo anterior nos moviliza como profesores de esta disciplina, a estar en permanente consonancia con el avance de nuestra profesión y con las necesidades de las personas que son el motor que nos impulsa a aprender, innovar o crear nuevos procesos o herramientas de intervención kinesiológica. Nos motiva buscar la excelencia en la formación de los y las estudiantes, a colaborarles en su desarrollo integral, de manera que sean capaces de ser técnicamente excelentes, pero también a lograr que vean a las personas como el todo que son, con contextos que las impactan incluso en su condición de salud, personas con derecho a participar con un rol activo en la sociedad y que muchas veces se ve imposibilitado por los efectos generados por una condición de salud y el contexto en el que se desenvuelven.

 

Como profesionales de la Kinesiología, nos queda el deber de continuar con el desarrollo de nuestra profesión, de generar las evidencias necesarias a través de la investigación que sigan respaldando nuestro quehacer en todas las áreas y de seguir posicionándola en nuestro sistema sanitario, de manera de otorgar oportunidad de acceso a esta atención a las personas que lo requieran, con la calidad que éstas merecen.