Recibía bullying por problemas de habla, sobre el tiroteo en Texas

Pedro Jorquera Fernandez

Académico carrera Fonoaudiología UST

Puerto Montt

El martes de esta semana, en Texas, un joven de 18 años realizó un violento ataque armado asesinando a 19 niños y 2 adultos. Aparece una vez más la discusión sobre la facilidad para adquirir armas de fuego y el bullying.

Una publicación en el Journal of Adolescence realizada por un equipo neozelandes (Marsh, L. 2009) listó algunas de las formas de bullying más comunes: un insulto por el aspecto físico, sobrenombres por usar lentes, burlas por los nombres de pila, la exclusión y acoso a través de teléfonos celulares.

En este caso se ha destacado que el asesino era acosado por problemas de habla que sus excompañeros describieron como interposición lingual y tartamudez.

La interposición lingual consiste en producir sonidos con la lengua entre los dientes en lugar de producirlos posicionando la lengua detrás de los dientes para los sonidos D, T y S.

La tartamudez se caracteriza por interrupciones en la producción del habla a modo de repeticiones de sílabas, bloqueos o expresiones como “mmm”, “eh”. Este trastorno comienza durante la niñez y se mantiene toda la vida. Para algunas personas, las interrupciones aparecen durante actividades específicas; por ejemplo, cuando hablan por teléfono o ante un grupo grande de personas. Para la gran mayoría restante, sin embargo, las dificultades se dan en toda una variedad de situaciones.

En la actualidad, existen estrategias de intervención desde la fonoaudiología para disminuir los síntomas de la tartamudez. El fonoaudiólogo puede ofrecer una amplia gama de estrategias que incluyen el trabajo directo sobre la fluidez, el abordaje cognitivo, la relación con el lenguaje entre otras.

La interposición lingual, también tiene un tratamiento efectivo abordado desde la reeducación de los órganos fonoarticulatorios como la lengua, labios y mandíbula, muchas veces en conjunto con un odontólogo.

Si bien de acuerdo con la legislación actual, estas dificultades no son abordadas en los programas de integración escolar una derivación oportuna puede hacer la diferencia. Por otro lado, los fonoaudiólogos insertos en educación cumplen un importante rol informando y concientizando a la población sobre la existencia de estas dificultades.

La concientización y el tratamiento no bastan para disminuir o eliminar el bullying y están lejos de ser el problema principal, pero sí puede ser un aporte para evitar tragedias de este tipo.