Llegó el momento en que muchos niños y niñas pasan a una nueva etapa en su relación con los lápices. Después de haberlos acompañado en la libre expresión de sus emociones, ahora los lápices pasan a ser una herramienta de precisión para aprender a escribir. Esto, sin dejar de lado los dibujos que pueden seguir saliendo de su infinita creatividad.

Esta nueva etapa requiere del apoyo de la familia, ya que en ella se aprende la autoconfianza y se contagia el entusiasmo por aprender. También se necesitan buenas herramientas, que funcionen correctamente y que hagan más entretenido este proceso.

¿Cuáles son los materiales más adecuados para motivar al aprendizaje? “Yo recomendaría contar con una gran variedad de lápices, colores, grosores, puntas y tintas en formato permanente y no permanente. Esto permite ir midiendo las preferencias de cada niño o niña y, por supuesto, ir variando, de modo de que sea divertido, sobre todo para los más chicos, a quienes les gusta probar diferentes colores y formas”, aconseja María José Pucci, quien comparte manualidades y experimentos en su cuenta de Instagram Ideas para Niños, (@ideasparaninos).

Mientras niños y niñas se familiarizan con diferentes materiales, hay uno en especial que será su aliado para desarrollar la precisión. Se trata del Paper Mate Mirado Candy Triangular, un lápiz grafito que tiene tres caras, como un triángulo. Esta forma facilita la postura, y hace más cómoda la sensación del lápiz entre los dedos. Además, incluye una goma ultra durable, y viene en packs de cuatro, para tener siempre un lápiz de repuesto y así seguir practicando las primeras letras.

La idea es que los niños puedan ejercitarse libremente en casa. Por eso, María José Pucci recomienda algunas actividades para realizar con el apoyo de la familia: “Una de mis sugerencias principales es practicar la sucesión de números y escribir el nombre, siguiendo el patrón anterior. Esta actividad ayuda a familiarizarse 100% y empezar a reconocer los números y letras”.

La familia puede colaborar organizando un espacio para que los niños disfruten practicando sus nuevas habilidades. “Dado que se trata de niños que recién comienzan la etapa escolar, yo les recomiendo hacer estas actividades lo más entretenidas posible, con lápices de distintos colores que puedan captar su atención y pasarlo bien mientras aprenden. Es importante hacer estas actividades en un lugar que sea cómodo para ellos, como una mesa a su altura, y disponer los lápices en vasitos, por ejemplo”, recomienda María José Pucci.