Los estudiantes de octavo básico recibieron su certificado en compañía de sus seres queridos y comunidad educativa.

En una alegre celebración la Escuela Pablo Neruda ha despedido a treinta estudiantes que obtuvieron su licencia de educación básica, dando término a una etapa para iniciar un nuevo camino en la educación media.

“Estamos muy contentos como colegio, los profesores y el personal en general porque despedimos a nuestros queridos alumnos de octavo básico. Deseamos para ellos lo mejor, todos han postulado a establecimientos en su mayoría municipales y nos pone contentos porque sabemos que tendrán un buen desempeño en sus liceos”, expresó Iván Inostroza, inspector general del establecimiento.

En la jornada se premió a los tres primeros lugares según su rendimiento académico y a quienes se destacaron por su participación en talleres deportivos y artísticos. Además, se entregó un reconocimiento al mejor compañero, premio que fue otorgado por los mismo estudiantes de la generación.

Nelson Arteaga, encargado de extraescolar y profesor de educación física del establecimiento, se mostró muy emocionado al entregar los premios correspondientes, indicando que “este año fue difícil, pero fue tremendo y de mucho aprendizaje. Estoy muy contento y emocionado porque despido a todos mis estudiantes de octavo y este año trabajamos fútbol y danza, sin lugar a dudas fueron experiencias y tratamos de hacer lo mejor posible. Las despedidas son tristes pero a la vez emocionantes porque entran a otra etapa y esperamos haber entregado lo mejor para su desarrollo personal e integral”.

Además, el estudiante escogido mejor compañero, Bastian Toledo, contó que “siempre hice reír a mis compañeros, me gusta hacerlos felices. Estoy feliz y me voy contento, es bacán haber pasado esta etapa”.

En la ceremonia la directiva del establecimiento municipal dedicó palabras de apoyo a los jóvenes que pronto iniciaran un nuevo camino en la educación media, deseándoles éxito en sus proyectos y agradeciendo a las familias por todo el trabajo y cariño entregado a la escuela.