Un nutrido programa con discursos animadores y prácticos consejos basados en la Biblia se desarrollará este domingo en el Gimnasio Municipal de Castro, ubicado en Ramón Freire 610.

Con entrada liberada testigos de Jehová de las 11 congregaciones existentes en las 10 comunas de la provincia, asistirán al evento titulado: “Esperemos a Jehová con anhelo”, donde estudiantes, vecinos, amigos y personas interesadas en profundizar lo que la Biblia enseña, podrán disfrutar de los variados discursos.

Jonatan Sandoval, vocero local de los testigos de Jehová, invitó a toda la comunidad al evento cuyo programa iniciará con un preludio musical a las 9.30 horas: “Extendemos la invitación gratuita a toda la comunidad a esta asamblea, que contará con consejos útiles tomados de la Biblia. Queremos que todos se beneficien de esta instrucción, en especial del discurso público programado para las 13.30 horas titulado: ¿Sigue siendo la paciencia una virtud?, donde se entregarán prácticos consejos para desarrollar esta cualidad que resulta de gran ayuda en estos tiempos donde la era de la inmediatez dio paso a la impaciencia y con ello a la violencia, que todos queremos erradicar”.

Para las 14.00 horas, los presentes escucharán el resumen del estudio correspondiente a La Atalaya, revista por la que se conoce mundialmente a los testigos, que se publica desde julio de 1879, acompañando a las congregaciones con guía para entender las escrituras.
A las 14:40 se iniciará una serie de discursos en lo que se verán prácticos consejos para cuando sienta soledad, cuando se cometen errores, cuando veamos que les va bien a los malvados, finalizando la serie con el discurso, “Hay un premio para el justo”.
El programa de asamblea, explicó Jonatan Sandoval, culminará a las 16.15 horas. Para conocer más de los testigos de Jehová, visite su sitio web www.jw.org, disponible en más de 1.087 idiomas y lenguas.

En la ocasión se realizará la ceremonia de bautismo con un discurso dirigido de manera especial a quienes tras estudiar las escrituras, deciden de manera personal y consciente, sumergirse en agua, tal como dejo el modelo Jesús, quien demostró a los 30 años que quería hacer la voluntad de su padre Jehová Dios.