Las Comunidades y asociaciones  Indígenas del territorio de Kalfü ko, integrantes de la Mesa territorial Indígena, condenamos y lamentamos los eventos represivos acontecidos en la región de la Araucanía.

Ha sido asesinado a mansalva el dirigente y  comunero mapuche Camilo Catrillanca, producto de un disparo en la cabeza, realizado por efectivos del Comando Jungla que ingresaron brutalmente al lof Temucuicui. Camilo, nieto del lonko de la comunidad Juan Catrillanca, ex dirigente estudiantil de la zona, activo líder por la recuperación territorial y padre de una niña de seis años. Hay una familia que hoy llora la muerte de un hijo, hermano y padre; hay miles de mapuches que hoy lloramos el asesinato de nuestro peñi. Condenamos, además, de manera categórica la detención y apremios ilegítimos de los que fue víctima el adolescente,   que acompañaba al peñi Camilo.

La Wallmapu suma un nuevo dolor al largo historial de vejaciones y abuso que ha azotado al territorio mapuche, que se remonta a la invasión perpetrada por el Estado de Chile hace casi un siglo y medio.

El asesinato a mansalva de Camilo se suma a una extensa lista de víctimas de la violencia de Estado en democracia: Agustina y Mauricio Huenupe Pavian (2001), Alex Lemún (2002), Juan Collihuin Catril (2006), Matías Catrileo (2008), Johnny Cariqueo (2008) y Jaime Mendoza Collío (2009), entre otros casos que aún claman por justicia.

El asesinato de Camilo Catrillanca responde a un proceso de mayor alcance, donde de manera maquiavélica se mezclan interés ajenos al mundo mapuche, en el cual empresas forestales e hidroeléctricas, mineras, se han confabulado para  criminalizar la lucha mapuche de reivindicación de tierras, derechos, reconocimiento constitucional  y dignidad para nuestro pueblo. No es necesario nombrar la larga lista de montajes que se han perpetrado, con la intención de confundir y desinformar a la ciudadanía, mediante la manipulación mediática, y así validar la acción y el uso desmedido de la fuerza policial.

Exigimos que se detenga el proceso de militarización del Wallmapu, y el desmantelamiento inmediato del comando Jungla, como una señal de respeto pleno a los Derechos Humanos del pueblo mapuche, para que de una vez por todas el Estado chileno respete y de cumplimiento de los convenios y tratados internacionales, suscritos en esta materia, que permita garantizar el desarrollo de nuestras comunidades de los pueblos indígenas.

Exigimos al Gobierno investigar, sancionar e imponer penas que se condigan con la gravedad de los hechos, del  asesinato de Camilo Catrillanca;   y a implementar las acciones correctas que permitan alcanzar la Paz en el Wallmapu, abandonando el uso irracional y desmedido de la fuerza policial.

Las comunidades y asociaciones indígenas, integrantes de la Mesa Territorial Indígena de la Comuna de Calbuco, se mantienen en un permanente estado de alerta, reiteramos nuestra posición del dialogo, sin embargo, frente a un Estado que no quiere dialogar ni escuchar, nuestro pueblo continuara movilizándose.

 

 

Atte

Mesa territorial  Kalfü -ko

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