UNAB Viña del Mar presentó libro sobre los humedales de la Región de Valparaíso

Con el objetivo de recorrer y relevar los principales humedales de la Región de Valparaíso, el vicerrector de la UNAB Sede Viña del Mar, Gerald Pugh, impulsó la creación de este libro.

“Hace dos años nació la idea de concretar este libro, un texto que pudiera integrar distintas disciplinas y miradas, además que reflejara la importancia de los humedales de nuestra Región. Los atractivos que contienen estos ecosistemas, tanto en términos naturales (flora y fauna) y culturales como de paisaje, permiten el desarrollo local a través del turismo, la recreación, el descanso y el reencuentro con la naturaleza”, señaló Gerald Pugh Olavarría, vicerrector de la UNAB Sede Viña del Mar, en el lanzamiento del libro “Humedales de Valparaíso: Agua, belleza y contraste”.

Los sitios fotografiados por los profesores y que fueron ilustrados en este libro fueron el Humedal Las Petras; el Humedal de Campiche; el Humedal de Mantagua; el Humedal de Concón; el Humedal de Reñaca; el Humedal de Viña del Mar; el Humedal de Tunquén; el Humedal Córdova; el Humedal Cartagena; el Humedal Río Maipo; el Humedal El Yali y el Humedal Andino Juncal.

 

La publicación contó con la colaboración de un comité editorial interdisciplinario compuesto por académicos de este Sede: Daniel Nieto, director de la Licenciatura en Historia; Pablo Rebolledo, director de la carrera de Administración en Ecoturismo; Alan Fox, director de Diseño Gráfico; y Mauricio Delpino y Sonia Martínez, profesores adjuntos de esta Universidad.

Obra en imágenes

“Presentación del Libro Humedales de Valparaíso en imágenes”, se tituló la ponencia del profesor Alan Fox y de Mauricio del Pino, académico de Campus Creativo UNAB Sede Viña del Mar (periodista y fotógrafo profesional).

Fox indicó que Chile tiene unos veinte tipos de humedales, ocupando una superficie de 4,5 millones de hectáreas. “El mismo nombre del libro dice del valor de los humedales como reservas de agua para el planeta, de la belleza siempre sorprendente de la naturaleza, así como también de los contrastes que se generan en esta dicotomía naturaleza-ciudad, y los conflictos del hombre con el entorno en medio de una necesidad global de avanzar a regenerar la tierra y sus bondades ya estresadas por el actuar de la modernidad”, reflexionó el profesor.

Ecoturismo y Humedales

“Humedales como espacio de conservación y ecoturismo” fue la charla dictada por Francisco Barriga, director (I) de la carrera de Administración en Ecoturismo. El profesor destacó actividades que se dan en los humedales como el “Aviturismo”, que consiste en observar, admirar, monitorear y reconocer a las aves en sus ambientes naturales, además de promover su protección y conservación. “Como actividad turística de bajo impacto permite el aprovechamiento de las riquezas naturales de la zona (aves) y la interacción con la población local. Usualmente deja un incentivo económico para el destino, siendo una de las modalidades de ecoturismo y turismo especializado”, destacó el académico. En Chile, si bien, no hay cifras oficiales, se estima que llegan al país cerca de tres mil personas motivadas a observar aves.

 

Ecosistemas de Carbono Azul

«Ecosistemas de carbono azul: La importancia de los humedales costeros para combatir el cambio climático» se denominó la conferencia de cierre de Jorge Sánchez Nova, biólogo marino y Dr (c) en Medicina de la Conservación UNAB con especialización en humedales.

“Existen algunos humedales costeros que poseen una característica muy relevante en el contexto de la crisis climática actual, secuestrando y almacenando cantidades importantes de carbono, mitigando el efecto del cambio climático. Estos ambientes se les denomina ecosistemas de carbono azul y dentro de este grupo están las praderas de pastos marinos, los manglares y los humedales costeros (o también conocidos como marismas)”, explicó Sánchez.

El profesional agregó que lamentablemente “los ecosistemas costeros de carbono azul están entre los más amenazados del planeta. Se estima que se destruyen entre 340 mil y 980 mil hectáreas cada año”. Asimismo, Sánchez mencionó que aproximadamente se han perdido hasta un 67% de la distribución histórica global de los manglares, el 35% de las marismas y el 29% de los pastos marinos.

“Si estas tendencias continúan al ritmo actual, durante los próximos cien años podrían desaparecer entre el 30% y el 40% de las marismas y los pastos marinos, y prácticamente todos los manglares sin protección”, puntualizó.

Se han logrado avances para incluir estos sistemas en los mecanismos de financiamiento y las políticas nacionales e internacionales, no obstante, el biólogo marino señaló que la integración plena de las actividades de manejo costero como parte de la cartera de soluciones de países para mitigar el cambio climático no ha tenido lugar aún. “Esta oportunidad de incorporar el carbono azul a las políticas y a la gestión podría dar lugar a una mayor conservación (restauración y protección) de los ecosistemas costeros en todo el mundo, lo que preservaría y acentuaría los múltiples beneficios que estos sistemas ofrecen a la humanidad”, concluyó Sánchez.