La iniciativa de la JUNAEB permite, año a año, darle continuidad de estudios a niños y jóvenes provenientes de distintos puntos de la comuna y provincia.

Con una pequeña ceremonia, la Corporación Municipal y la Junta de Auxilio Escolar y Becas quisieron finalizar el programa Residencia Familiar 2022 que este año favoreció a 194 estudiantes que cursan enseñanza media y superior dentro de la comuna.

En la ocasión, se reconoció el importante rol que cumplieron las 99 familias tutoras que este año acogieron a niños, niñas y jóvenes que no cuentan con oferta educacional en sus hogares de origen, otorgándoles no solo alojamiento y alimentación, sino también afecto y cuidados que favorezcan su desarrollo integral como estudiantes.

“Ellas realizan una contribución importantísima desde el punto de vista de nuestra misión institucional que es la formación de personas y que va más allá de las aulas. Son niños que vienen de lugares y contextos muy distintos a insertarse a un sector urbano y estas familias contribuyen a la contención, a la adaptación de los niños y de acogerlos sobre todo en estos tiempos de post pandemia”, sostuvo el director de Educación Municipal, Jaime Márquez.

Por su parte, la directora regional de Junaeb, Adriana Maldonado, agradeció la invitación hecha por la Corporación Municipal y del alcalde Juan Eduardo Vera a participar del cierre de este importante programa correspondiente al año 2022.

Para Junaeb regional es un programa de real importancia, porque sabemos el aporte que hacen principalmente mujeres, abriendo las puertas de su hogar para que niñas, niños, adolescentes puedan terminar sus estudios. Sabemos que la gran mayoría viene prácticamente de todo el archipiélago. El programa residencia en Castro es uno de los más grande que tiene el archipiélago, tenemos 99 familias tutoras que nos permiten un apoyo adicional, abren sus puertas, trabajan con los niños y son el segundo hogar que ellos tienen para poder terminar sus estudios”, señaló la autoridad regional.

En tanto, Marcia Torres, quien está orgullosa de las tres generaciones de niños y jóvenes que ha acogido en el seno de su familia, se considera una mamá tutora “muy preocupada, cualquier problema que tiene el niño, me acerco al colegio, a la corporación y siempre estoy constantemente con asistente social, ayudándolo, ellos pasan a ser parte de un familiar”.

Además, destaca que incluso, aún vive con ella una joven que es de Melinka, que “para mí es una hija, ella está trabajando, es profesora y no se ha ido, sigue conmigo”.

Este es precisamente el espíritu del programa Residencia Familiar que resaltó, Paula Oyarzo, asistente social del Departamento de Bienestar Escolar de la Corporación Municipal, ya que según recordó, ninguna mamá tutora en Castro dejó el programa durante la pandemia, como ocurrió en otros lugares.

Por eso, dijo que “son unas mamás muy comprometidas que tienen mucha cercanía con los estudiantes, eso se agradece mucho y en la Corporación las puertas siempre están abiertas. Agradecerles porque son fundamentales en el programa, son mamás en realidad de niños que vienen de sectores rurales, muchos de ellos vulnerables y ustedes los apoyan muchísimo.”

En esta una oportunidad, se entregó un reconocimiento a cada tutora y un pequeño obsequio a los jóvenes que este año egresan de cuarto medio, quienes valoraron el trabajo conjunto entre la Corporación Municipal y la Junaeb para ejecutar este programa de Residencia Familiar que les permitió completar su educación media.

Por último, cabe señalar para renovar o postular a la residencia familiar y a las becas Junaeb estará abierto el proceso hasta el 20 de enero de 2023, a través del portal www.portalbecas.junaeb.cl y también en el departamento de Bienestar Escolar de la Corporación Municipal.