Emprendimiento publicitario apuesta por un servicio personalizado

Emprendimiento publicitario apuesta por un servicio personalizado en Puerto Montt

 Claudia Berríos, dueña de “La Décima Impresión”, es una de las ganadoras de la tercera versión de Impulso Chileno que además de un premio en dinero ofrece capacitación y mentorías para el mejor desarrollo de emprendimientos.

Se enteró del concurso por las redes sociales, “veía que había grupos de emprendedores que hablaban mucho de Impulso Chileno. Entonces empecé a seguirlos hasta que vi que estaban abiertas las postulaciones y postulé, la verdad que no con mucha esperanza” reconoce Claudia Berrios Bravo, de Puerto Montt (Región de Los Lagos), y parte de los 100 ganadores de la tercera versión de la iniciativa que impulsa la Fundación Luksic en alianza con la Escuela de Administración UC y la corporación Simón de Cirene.

“Nunca habíamos ganado nada y fue súper gratificante para nosotros el que alguien reconociera nuestro esfuerzo y nos diera el apoyo económico académico” dice la dueña de “La Décima Impresión” un negocio familiar de publicidad que partió en 2016 cuando ella quedó cesante.

De hecho, el finiquito lo ocupó como capital inicial: “Decidimos como familia invertir el dinero para nuestro propio bien. Siempre nos atrajo mucho ser independientes, manejar nuestros tiempos, manejar el tiempo con nuestra familia, tenemos dos hijas, entonces todo eso nos llevó a buscar ser independientes” cuenta.

Partieron en Villa Alemana, en la Quinta Región, y aunque pusieron muchas ganas para abrirse camino fue muy difícil por la competencia: “Muchos ofrecían trabajos publicitarios muy baratos, bajo el costo. Nos costó mucho posicionarnos, lo logramos, pero ganando muy poco. Entonces decidimos cambiarnos a Punta Arenas, allí nos fue bien, pero dedicábamos solo el tiempo libre para nuestro emprendimiento. Seguimos a una escala muy chiquitita de estampados, de tarjetas de presentación y cositas así, y pudimos seguir, pero la verdad que no dedicándonos al cien por ciento”.

Tras pasar un año difícil, decidieron cambiar una vez más de ciudad y llegaron a Puerto Montt convencidos de que en esta ocasión el negocio sí funcionaría. Y así fue. “Conseguimos clientes, amigos que hoy después de cuatro años siguen confiando en nuestra pyme. Hemos crecido, contamos con más espacio, más colaboradores, trabajan con nosotros dos personas más las cuales han sido de mucha ayuda en todo este recorrido” relata Claudia Berríos contenta.

En la Región de Los Lagos mejoraron sus opciones y encontraron un nicho a desarrollar: “La verdad es que nos ha ido bien gracias a Dios. Hemos crecido considerablemente y estamos felices de haber podido ganar el Impulso Chileno porque habíamos postulados a otras cosas y nunca hemos ganamos nada”.

En “La Décima Impresión” se dedican a otorgar diferentes tipos de servicios publicitarios que van desde el diseño, estampado, fabricación de letreros, gigantografías y señaléticas, además de elaborar artículos de merchandising (como tazones con logo) en corte láser e impresión 3D.

Como es un emprendimiento familiar, se destacan por prestar una atención personalizada que incluye visita a terreno.

Uno de sus fuertes es el rotulado vehicular, un sistema que consiste en adosar la publicidad en la superficie de vehículos lo que permite a los sus clientes promocionar su marca en forma constante.

Y precisamente será en esta área en donde invertirán su premio, pues adquirirán una maquinaria de laminado en frío que aplica una placa protectora a las impresiones de manera que pueden instalarse en diferentes superficies y sea un trabajo duradero dada las condiciones climáticas que hay en la ciudad portuaria donde residen.

Además del dinero, Claudia Berríos agradece la capacitación y las mentorías que recibieron porque además de aprender lograron optimizar sus procesos, aunque reconoce que todavía deben mejorar muchas cosas para seguir satisfaciendo las necesidades de su clientela que por ahora integran empresas navieras y emprendedores locales.

No obstante, a su juicio, la clave de que su pyme siga creciendo es que “somos cuatro personas remando al mismo lado, con confianza y compromiso. Gracias a Impulso Chileno nos hemos dado cuenta de que sí lo estamos haciendo bien y nos premiaron con esta gran ayuda, esperamos que nuestras hijas sigan nuestra empresa familiar y perdure en el tiempo”.

Además de todo el empuje que han recibido de Impulso Chileno, Claudia Berríos celebra que el 51% de los ganadores pertenezca a regiones: “Uno siente que a veces todo es muy centralizado, que todos los premios o los fondos están más enfocados en la Región Metropolitana. Así que nos sentimos afortunados”.