A propósito del Día Mundial del Riñón conmemorado recientemente, la médico internista del Servicio de Salud Del Reloncaví, Carolina Simpson, destacó la importancia de cuidarnos y así prevenir distintas complicaciones como la insuficiencia renal definida por daño en la estructura y/o filtración de los riñones por un periodo mayor a 3 meses.

Los riñones, según explica la profesional, son los órganos que, entre otras funciones, filtran la sangre para que eliminemos de nuestro organismo a través de la orina, los desechos y el exceso de líquido de nuestro cuerpo, esa es la  función que puede verse alterada debido a diversos factores o enfermedades. Es por ello, que el  reconocer qué nos expone al deterioro de su función, nos permite intervenir precozmente y así limitar su daño.

Carolina Simpson explica que las causas principales de la insuficiencia renal son la diabetes e hipertensión mal controlada, la obesidad y también antecedentes familiares. Otros factores de riesgo son el alto consumo de alimentos ricos en sodio, el tabaquismo, la automedicación con fármacos potencialmente dañinos a los riñones como el uso desmedido de  antiinflamatorios.

“Si un paciente tiene alguno o varios de estos factores debe revisarse con exámenes que permitan evaluar la filtración renal, siendo la creatinina el principal marcador empleado en la práctica clínica para ello”, asegura y agrega, “la insuficiencia renal no presenta síntomas específicos, generalmente las personas asocian el dolor lumbar con problemas a los riñones, pero eso no necesariamente es así, a menos que se trate de una pielonefritis aguda, por ejemplo”.

La importancia de detectar a tiempo la enfermedad radica en que tiene distintos grados de evolución, “según datos de la OMS el 10% de la población mundial vive con la enfermedad, pero lo más complejo es cuando se llega a la fase 4 o 5 donde el único tratamiento posible es la diálisis, tratamiento bastante invasivo para el paciente. Las primeras fases pueden ser tratadas por un médico general o internista, pero las más avanzadas debe verlas un nefrólogo”.

En referencia a lo anteriormente citado, y como estrategia preventiva que fomente prevención de la enfermedad renal crónica, y el progreso de ésta en caso de ya tenerla, la médico internista recomienda las 8 reglas de oro para cuidar los riñones:

  1. Mantenerse activo
  2. Llevar control regular de los niveles de glucosa en la sangre.
  3. Monitorear la presión arterial.
  4. Alimentarse sanamente y cuidar el peso
  5. Beber agua (2 litros al día)
  6. No fumar
  7. No automedicarse
  8. Revisar la función renal si:

–          Padeces diabetes

–          Tienes presión arterial alta

–          Tienes obesidad

–          Algún familiar padece enfermedad renal.

Finalmente, Carolina Simpson, hace el llamado a evitar bebidas, ya que son altos en fósforo y azúcar, productos procesados ya que son ricos en sodio, “debemos ser más selectivos en lo que comemos y realizar paulatinos cambios de hábitos que nos ayudarán a  tener una mejor calidad de vida”.