– La salmonicultura es uno de los métodos de producción de alimentos más eficaces en utilización de recursos. El salmón requiere solo 1,2 kg de alimento para producir 1 kg de proteína saludable. Es siete veces más eficiente que el ganado de vacuno, que requiere 8 kg para lograr 1 kg, respectivamente.  

– Asimismo, según el Global Salmon Initiative (GSI), al comparar la huella de carbono de distintas proteínas animales, el salmón es el que genera menos CO2, con una emisión de solo 0,60 kg por cada 40 gr de proteína comestible.

           La Organización de las Naciones Unidas ha estimado que la población mundial será de 9 mil millones a 2050. Asimismo, ha señalado que para 2030 será necesario contar con 85 millones de toneladas adicionales de productos del mar para mantener los niveles de consumo requeridos para el bienestar de las personas. Considerando que la pesca tradicional ha alcanzado sus niveles máximos de producción, la acuicultura representa la única forma de satisfacer este requerimiento.

Al mismo tiempo, la emergencia climática que vive el país nos presiona a buscar modelos productivos sustentables y eficientes. En este escenario, al medir diferentes proteínas animales, el salmón es una de las más eficientes del mundo no solo en la conversión y la porción comestible, sino también en la medición de huella de carbono para producir y su retención de energía.

La salmonicultura, en términos de Factor de Conversión, es siete veces más eficiente que el vacuno si realizamos la comparación en términos de alimentación. Solo se requiere 1,2 kg de alimento para producir 1 kg de salmón. En tanto, en el vacuno la conversión es de 8 kilos para  1 kg, respectivamente.

Además, si hacemos hincapié en la huella de carbono que genera la producción de las  proteínas animales, podemos ver que el salmón también se alza como una solución amigable con el medioambiente. Según el Global Salmon Initiative (GSI), el salmón es el cultivo que libera menos CO2 al medioambiente en su producción, con un índice de 0,60 kg por cada 40 gr comestibles, lo que es muy dispar a los 5,92 kg de CO2 por cada 40 gr emanados por la industria del vacuno.

“Nos encontramos en un escenario mundial, donde el cambio climático está siendo un protagonista de la historia. Es por esto que la industria salmonera de Chile ha estado trabajando arduamente en medir y buscar herramientas para reducir su huella de carbono, aunque ya sea una de las industrias de proteína animal con la medición más baja en su producción, igualmente puede reducir y/o compensar el remanente, así como las asociadas a otras etapas de la cadena”, señaló  la jefa de Sustentabilidad del Instituto Tecnológico del Salmón (Intesal), Ximena Rojas.

“La acuicultura es parte de la solución al problema de alimentación mundial y al cambio climático con miras hacia el futuro, siendo la Salmonicultura parte de esa revolución que busca ahondar en el cultivo del mar de manera sustentable. Es por esto que estamos desarrollando un Acuerdo de Producción Limpia (APL), el cual se encuentra enfocado en diferentes temas socioambientalmente sustentables, como la economía circular, el potenciar a las comunidades en este tema y además reducir las emisiones de CO2 al medioambiente”, agregó.