Venus es el tercer astro más brillante del cielo, después del Sol y la Luna, y ha cautivado con su belleza a la Humanidad desde tiempos antiguos, quienes le pusieron el nombre de la diosa romana del amor.

Este 14 de septiembre, una breve nota de prensa relacionada con Venus causó un gran
impacto en el mundo. Un grupo de astrónomos, liderado por la Dra. Jane Greaves, descubrió la presencia de fosfina –un gas compuesto por fósforo e hidrógeno– en la atmósfera venusina.

Para realizar esta investigación, cuyos resultados se publicaron en la prestigiosa revista
Nature Astronomy, los astrónomos utilizaron las instalaciones del observatorio ALMA,
ubicado en Chile.

¿Pero cuál es la razón de tanto revuelo? En la Tierra, la fosfina proviene principalmente de
dos fuentes: procesos industriales y actividad microbiana. Por este motivo, se considera a la fosfina como una “biofirma”, es decir, una sustancia que proporciona evidencia de una
posible existencia de vida. Si bien en Venus la fosfina también puede venir de fuentes no
biológicas, como la actividad volcánica, la concentración atmosférica debería ser mucho
menor que la observada.

¿Es suficiente esta evidencia para asegurar que hay vida en Venus? Lamentablemente, no.
Pero es un enorme primer paso. El paso siguiente es desarrollar misiones espaciales que en
los próximos años realicen experimentos en la atmósfera del planeta, los cuales permitan
confirmar o descartar la presencia de vida. Sin embargo, no es una tarea fácil.

Las condiciones atmosféricas de Venus son extremadamente hostiles, con nubes de ácido sulfúrico y una alta  densidad, lo cual dificulta el envío de estas misiones.

Afortunadamente, la casualidad nos ha dado una mano esta vez. La misión espacial europeojaponesa BepiColombo deberá sobrevolar Venus dos veces, como parte del trayecto normal hacia su destino final, Mercurio. Los encargados de esta misión confirmaron que
aprovecharán estos acercamientos –el primero en octubre de este año, y el segundo en agosto de 2021– para buscar fosfina en la atmósfera y así confirmar los resultados encontrados por mlos astrónomos.

Definitivamente estaremos atentos a cómo se desarrollará esta historia, que
marca el inicio de una nueva etapa en la búsqueda de posible vida extraterrestre.

Dr. Claudio Navarro Molina
Centro de Docencia Superior en Ciencias Básicas
Universidad Austral de Chile
Sede Puerto Montt