Son interesantes las reflexiones que nos deja esta versión del Mundial de Futbol 2018. La primera de ellas es que a juicio de muchos Chile debió estar en esta cita deportiva. Hubo, quizás, una excesiva confianza, como también la falta de una buena planificación y conocer bien a la competencia.

Particular resulta la eliminación de aquellas selecciones con connotados jugadores destacados y que fueron eliminados en las primeras fases del torneo. Lo cierto es que los cuatro equipos que llegaron a la semifinal destacan, entre otras aptitudes propias de cada jugador, por su sólido trabajo en equipo, el cual fue vital para el logro de los resultados.

En este contexto, es destacable el caso de Inglaterra y Francia, selecciones que han trabajo desde hace años en el desarrollo integral de formación de equipo para lograr resultados en categorías sub 17 y sub 20.

Lo mismo ocurre en los emprendimientos; se puede tener una muy buena idea, pero se debe desarrollar un modelo de negocio, probar que resulte y sobre todo una adecuada implementación que responde a una buena planificación; es necesario el entusiasmo, pero la excesiva confianza puede hacer que el emprendimiento no resulte.

En la Región de Los Lagos existen importantes sectores productivos que destacan a nivel nacional e internacional. Por ejemplo, el sector miticultor es el principal exportador de mejillones a nivel mundial, además de ser (la región) la segunda industria de salmón y a nivel nacional los principales proveedores de leche y carne. Son logros importantes que hay que destacar porque han permitido el desarrollo en la zona sur del país.

Por lo mismo, para seguir avanzando, es necesario trabajar en equipo. Las empresas líderes deberían considerar como estratégico a toda su red de proveedores de productos y servicios, además de ser parte en la mejora de los procesos y estar alineados al logro de todo un sector.

Una adecuada articulación público–privado favorecerá el desarrollo y la formación de nuevos sectores como también de emprendimientos. Por lo mismo hay que innovar. Después de todo, la competencia lo hace. Y es que ya no hay equipo chicos en el mundial